RESTAURACIÓN DE FINCA HISTÓRICA
Peretallada
Oriol transformó una ruina de más de 200 años, en un amplio y gran lugar para vivir con comodidad en medio de la historia!
Michel Meyer Giulini
Detalles
Este proyecto de rehabilitación de esta gran finca incluye una casa adherida a la muralla medieval, un jardín interior y unos cubiertos.
La majestuosa muralla medieval del pueblo se ha convertido en parte esencial de la escenografía interior de esta casa, de forma que ahora la energía y la luz transitan de manera natural por la casa. Las conexiones visuales entre plantas y extremos opuestos garantizan un óptimo comportamiento bioclimático, a la vez que amplían la percepción de los espacios.
El rediseño del patio interior lo convierte en el eje central de la casa. Ampliado y adornado con cristaleras cromáticas, este espacio actúa como una galería luminosa que captura y difunde la calidad cromática del sol del este. Es un oasis privado que invita al descanso y la contemplación.
Uno de los cubiertos se ha transformado en una de las piscinas privadas más grandes y elegantes del Ampurdán. Este espacio, mitad piscina y mitad orangerie, combina el mejor de ambos mundos: un jardín cubierto con una zona de piscina que se abre al exterior, creando un entorno perfecto para relajarse y disfrutar.
En la zona del cuarto de estar, la reforma ha eliminado el segundo piso para crear un amplio espacio de planta baja. Con techos altos y una abundante luz del norte que se derrama desde el patio, esta área se convierte en el lugar ideal para la convivencia y el bienestar.
Estamos orgullosos de la restauración de la fachada, donde hemos recuperado técnicas tradicionales de enlucido que estaban casi olvidadas. Rescatando patrones estilísticos como rombos y falsos sillares, y opciones cromáticas de la historia del pueblo, hemos devuelto en la vida el verdadero carácter de esta arquitectura, alejándonos del efecto de piedra picada asociado incorrectamente a la zona, y que realmente solo la representa en los últimos 70 años.
La majestuosa muralla medieval del pueblo se ha convertido en parte esencial de la escenografía interior de esta casa, de forma que ahora la energía y la luz transitan de manera natural por la casa. Las conexiones visuales entre plantas y extremos opuestos garantizan un óptimo comportamiento bioclimático, a la vez que amplían la percepción de los espacios.
El rediseño del patio interior lo convierte en el eje central de la casa. Ampliado y adornado con cristaleras cromáticas, este espacio actúa como una galería luminosa que captura y difunde la calidad cromática del sol del este. Es un oasis privado que invita al descanso y la contemplación.
Uno de los cubiertos se ha transformado en una de las piscinas privadas más grandes y elegantes del Ampurdán. Este espacio, mitad piscina y mitad orangerie, combina el mejor de ambos mundos: un jardín cubierto con una zona de piscina que se abre al exterior, creando un entorno perfecto para relajarse y disfrutar.
En la zona del cuarto de estar, la reforma ha eliminado el segundo piso para crear un amplio espacio de planta baja. Con techos altos y una abundante luz del norte que se derrama desde el patio, esta área se convierte en el lugar ideal para la convivencia y el bienestar.
Estamos orgullosos de la restauración de la fachada, donde hemos recuperado técnicas tradicionales de enlucido que estaban casi olvidadas. Rescatando patrones estilísticos como rombos y falsos sillares, y opciones cromáticas de la historia del pueblo, hemos devuelto en la vida el verdadero carácter de esta arquitectura, alejándonos del efecto de piedra picada asociado incorrectamente a la zona, y que realmente solo la representa en los últimos 70 años.